El COLOR DE LAS PALABRAS: LOLA MARINÉ, escritora

1º ¿Quién es LOLA MARINÉ?

Lola Mariné es una mujer inquieta, curiosa, siempre deseosa de aprender y de vivir nuevas experiencias. Siempre dispuesta a empezar de nuevo. Lo que me llevó en su momento a licenciarme en psicología, a trasladarme a Madrid para vivir durante veinte años en el mundo de la farándula, y a regresar a Barcelona para dedicarme por entero a escribir.

2º Comenzaste en el mundo de la interpretación en teatro, cine, televisión, radio pero más tarde te aventuraste en tu pasión personal por escribir. Cuéntanoslo.

Descubrí el mundo de los libros a muy temprana edad, escribir fue una consecuencia natural desde muy niña. Tenía una imaginación desbordante y un mundo interior que deseaba materializar. Después la interpretación se convirtió en mi prioridad, pero nunca dejé de escribir; en ese tiempo pasó a ser mi refugio y un sueño para el futuro. Cuando regresé a Barcelona, más madura y serena, creí llegado el momento de dedicarme a mi verdadera vocación.

3º Tus inicios fueron participando en varias recopilaciones de relatos ¿cierto?

Sí, cuando decidí ponerme a escribir “en serio” no sabía por dónde empezar. Encontré en Internet varios grupos de escritores y lectores, y uno en particular, El Recreo, se convirtió en mi casa; algunos de sus miembros siguen siendo mis amigos y ahora son escritores de éxito. Allí escribíamos relatos y compartíamos inquietudes. Y surgió la idea de hacer un libro recopilatorio: Tiempo de Recreo; su gran aceptación nos animó a publicar otro al año siguiente: Dejad que os cuente algo; desde otra Web me invitaron a participar en un libro, Atmósferas, en beneficio de la Fundación Vicente Ferrer, y en 2011 publiqué dos relatos en Tardes del Laberinto, editado por el grupo poético El laberinto de Ariadna.

4ºEn el 2010 publicaste tu primera novela Nunca fuimos a Katmandú. ¿Qué significo para ti esa novela y el poder darla a conocer?

Dos años después de su publicación, Nunca fuimos a Katmandú todavía no ha dejado de darme satisfacciones. Contar con el respaldo de una agencia literaria y de una editorial al primer intento fue más de lo que nunca pude soñar. Me dio confianza, y el convencimiento de que podía vivir de esto, de que podía ser escritora. Desde entonces vivo en un sueño hecho realidad.

5ºHablanos un poco de NUNCA FUIMOS A KATMANDÚ.

Nunca fuimos a Katmandú surgió de la necesidad de dar visibilidad a una generación de mujeres que casi pasa desapercibida en nuestra sociedad: las cincuentañeras, como me gusta denominarlas. Pensé que era una etapa muy interesante en la vida de cualquier mujer; cuando aún es joven, se siente segura de sí misma, sabe lo que quiere y tiene mucha vida por delante todavía. Quería demostrar que una historia con protagonistas que rondan la cincuentena podía ser entretenida, divertida y tierna. Y al mismo tiempo reivindicar esa edad, mostrar a unas mujeres auténticas, de carne y hueso y atractivas, con las que nos podríamos identificar y a las que podríamos admirar. No hay que avergonzarse de cumplir años, al contrario, hay que estar orgullosa de ello.

6º Recientemente has publicado un nuevo libro de relatos llamado GATOS POR LOS TEJADOS. ¿De qué nos hablan esos relatos?

Algunos de esos relatos estaban publicados en las diferentes antologías de las que hablábamos antes y otros son inéditos. Me apetecía recopilarlos en un solo volumen. Por eso la temática es muy variada: desde denuncia social, humor y sexo hasta género negro. Todos ellos situados en el ámbito de la actualidad y la vida urbana.

7º ¿Qué es lo que te motiva a escribir cada día y dar a conocer tus nuevas historias a los lectores?

Escribir es una necesitad, un juego, una diversión, es también angustia y dolor a veces, es mi vida. Un día sin escribir es un día perdido, no vivido. Podría escribir para mí misma, como he hecho durante años, pero compartirlo con los demás, provocar sentimientos en ellos y recibir su feedback es ya el colmo de la felicidad. Algo así como cuando actuaba: me lo pasaba genial y encima me pagaban, ¡jajaja!

8ª Sabemos que ya estas inmersa en la preparación de tu cuarta novela y en la revisión de una tercera ¿Esa capacidad creativa te ha permitido el estar en constante contacto con la escritura?

Supongo que sí. La energía genera energía. O como decía Picasso (creo): “que la inspiración te pille trabajando”. Escribir es mi trabajo, y como todo el mundo, tengo que trabajar todos los días, unos resultan más productivos y otros menos, pero todo es útil; surgen nuevas ideas, tomo apuntes para futuros proyectos. La mente es una máquina infernal: cuando la despiertas ya no hay quien la detenga.

9º ¿Es importante para un escritor adaptarse a los nuevos tiempos en temas como las redes sociales, webs, foros. Blogs etc?

Creo que es absolutamente imprescindible. Son fuentes inagotables de conocimientos, de relaciones, de promoción. Los escritores, como cualquier otro profesional, debemos adaptarnos al tiempo que nos toca vivir, que además, nos ofrece muchas ventajas. Aunque personalmente se me hace cuesta arriba todo este mundo tecnológico y siento que me quita mucho tiempo para escribir, pero también da buenos frutos y muchas satisfacciones.

10º Das clases en talleres de Escritura Creativa y colaboras en publicaciones digitales. ¿Eres una persona activa por lo que vemos?

Soy muy inquieta. No puedo estar ni un momento sin hacer nada. Siempre hay cosas nuevas que quiero emprender y me falta tiempo. Ayer lo pensaba mientras tomaba el sol en la playa: aun cuando parece que no hago nada, estoy “trabajando”, mi mente no para, y cuando llego a casa tengo que tomar un montón de notas y he resuelto algunos problemas. Por otra parte, debo hacer otras cosas, porque solo de escribir novelas no se puede vivir.

11º ¿Es complicado para un escritor todo lo que rodea la promoción de su novela para darla a conocer?

Más que complicado, es que requiere mucho tiempo. Hay que tener una presencia constante en los medios, idear nuevas formas para no aburrir, interactuar. Y todo eso va en detrimento de la concentración y la soledad necesarias para escribir. Pero es ineludible y hay que organizarse para dar un espacio a cada cosa. Los días solo tienen 24 horas y siempre se quedan cosas por hacer.

12º ¿Qué escritores/as son referencia para ti?

Me gusta mucho Isabel Allende, Rosa Montero, Paul Auster, y muchos más. Constantemente leo autores nuevos (y releo clásicos), para aprender de ellos. Me gusta el escritor elegante, que notas que ha trabajado mucho para encontrar la palabra exacta, que ha creado una frase diferente y hermosa, que sientes que ha disfrutado haciéndolo tanto como tú cuando lo lees.

13¿Qué es lo que más valoras de todo este tiempo escribiendo?

Por encima de todo, haber recuperado la libertad, ser dueña de mi vida y poder dedicarme en cuerpo y alma a lo que más me gusta.

14 Escríbenos algo improvisado que sientas en este momento o de alguno de tus escritos para toda aquella persona que lea tu entrevista y conozca el universo de tus palabras.

“Sí, tenía mucha suerte‑pensó Elena‑; la suerte de ser decidida y tenaz, de ser capaz de perseguir sus sueños sin rendirse hasta alcanzarlos, de creer firmemente que la suerte aguardaba agazapada en cualquier esquina y había que salir a buscarla cada día, aferrarse a ella con fuerza y no bajar nunca la guardia para que no pudiera escapar”.

Es un fragmento de Nunca fuimos a Katmandú.

15 ¿Qué le pedirías al futuro?

Poder seguir escribiendo y publicando durante muchos años. Vivir siempre como una verdadera escritora.