JORGE SCHUBERT, escritor y actor

1º ¿Quién es JORGE SCHUBERT?

Alguien que añora el paraíso perdido, y a quien el actor lo llevó a buscarlo, y el escritor le enseñó a encontrarlo.

2º ¿Cómo empezaste en el mundo de la interpretación?

Primero haciendo teatro en mi Pueblo (Pigué, un lugar mágico al sur de la Provincia de Bs As) y luego siguiendo el camino de mis sueños que me trajeron a Buenos Aires a los 17 años, una vez terminada la secundaria. A partir de ahí todo se fue construyendo de a poco, hasta que a los 26 salté a la popularidad a través de la televisión, con un programa semanal llamado “Zona de Riesgo” por el que me premiaron con el Martín Fierro Revelación.

3º Llevas tras de ti ya una larga y exitosa trayectoria como actor dedicada a actuar en televisión, en el mundo del cine y en el teatro ¿Que te ha aportado personalmente la carrera de actor en tu vida?

Mucho más de lo que yo hubiera imaginado. En principio me permitió experimentar y reconocer al abanico de personajes que me habitan. Es todo una sorpresa enterarse de que uno no es uno solo, sino una multiplicidad de voces y de roles que conforman ese UNO. A partir de ahí, y dado que el actor debe justificar a sus personajes a cambio de juzgarlos, me permitió comprender que el otro también está atrapado en sus propios roles, y que detrás de ellos está el verdadero ser que, en última instancia, es uno mismo. Diría que, a partir de verme a mí más allá de mis propios límites, puedo ver al otro más allá de sus propios límites. Todos somos un rol, y todos estamos detrás de ese rol. Este fue el mayor regalo que me dio la actuación, entre muchos otros.

4º ¿Te sientes como un corredor de fondo de la interpretación?

He tenido la oportunidad de experimentarme en todas las diferentes ramas de la actuación, ya sea Cine, Teatro o Televisión. Y he descubierto que, más allá de que cada una reclame un proceder distinto, a todas me he encontrado yendo, al fin y al cabo, conmigo.

             

5º Tiempo más tarde Jorge despierta su otra parte creativa escribiendo su primer libro DESPERTAR EN LA TIERRA con muy buena aceptación en el mundo literario. Háblanos de él.

Despertar en la Tierra nació de las entrañas del espíritu. De la urgente necesidad de recordar: ¿quién soy? ¿Qué hago aquí? ¿Qué es esto de estar vivos? ¿Y Dios? ¿Y la muerte? ¿Y la vida?...

Despertar en la Tierra modificó profundamente mi vida, ya que me invitó a reconectar conmigo, con el que soy. Con ese al que tenía olvidado. Fue un regalo que pasó a través mío, y quizás por eso, aunque me impactó, no me sorprendió que la prensa lo referenciara con las novelas de iniciación de Hermann Hesse y El Principito. Diría que Despertar en la Tierra, más que una novela, es un viaje de todos, cuyo destino es UNO.

6º ¿Siempre has sido una persona tan espiritual como reflejas en tus palabras?

Sí, solo que no lo recordaba hasta que de grande me enteré que siempre lo había sido. Todos somos espirituales. Eso somos. El espíritu es nuestro hogar. Y recordarlo hace que la experiencia física adquiera otro sentido. Nada cambia, pero todo cambia. Ya no importa perderse (ya que eso es lo que hace a la aventura), lo que importa es saber que uno tiene a dónde volver. Yo esto lo había olvidado por completo. Si te pones a ver, cuando nos vamos de viaje, por mejor que la estemos pasando, en algún momento queremos regresar a casa. A nuestro hogar. Lo mismo pasa con este viaje a la Tierra. Todos añoramos volver, solo que como olvidamos a dónde... Y más aún; ¿existe un a dónde? ¿Existe un lugar a dónde volver? Y desde esta perspectiva, este lugar es inhóspito y algo cruel ya que, apenas venir, apenas después de poner a andar el proceso de pensamientos, para enterarnos de que, tarde o temprano, seremos echados. ¿Cómo? ¿Por qué?¿A dónde?... Aquí comienza el verdadero juego en un Planeta llamado Tierra.

7º ¿Era importante para ti el llegar a escribir este libro y mostrar ese mensaje tan importante que guarda?

En principio era no solo importante, sino trascendente para conmigo mismo. Después, una vez que la experiencia me atravesó, entendí que había sido escrito para compartirla. Pero esto fue una consecuencia, no una causa. La causa estaba en mí, porque la causa era yo. Mi ignorancia. Mi profunda necesidad de recordar.

8ª Tu segundo libro es MORIR A TIEMPO. Háblanos también de él.

Claro, empieza así:

“El 7 de Abril mi vida cambió.

Para siempre.

Y del mismo modo que me niego a recordar aquel encuentro, no puedo olvidarlo. Hoy, como cada día desde hace casi seis meses, el escritor me insiste en regresar a ellos, para enfrentarme a mí”.

Morir a Tiempo nace a partir de una “propuesta, promesa o desafío”, en el que mi personaje, o yo, debemos transitar la vida desde la conciencia de la muerte.  

Es una novela que en alguna página te espera. Es un viaje con retorno ya que, a partir de entrar en contacto con la muerte, lo que aparece en todo su esplendor es la vida: “la conciencia que le es prestada a la muerte, le es devuelta a la vida, como un espejo, en la misma proporción”, dice en una parte. Y, “Del mismo modo que la noche es quien le da valor al día, la salud a la enfermedad o la tristeza a la alegría, es la muerte quien le da valor a la vida. Algo obvio me ha dicho, pero que de tan obvio, lo obvié”, dice en otra.

Morir a Tiempo me ha mostrado, no solo que la muerte no existe, sino que sin ella, tampoco existiría la vida. Ambas conforman las dos caras de la misma moneda, y una es el complemento de la otra. La misma relación que tenemos con la muerte, es la que tenemos con la vida. Diría, sin temor a equivocarme y acudiendo a los títulos de ambos libros, que es imprescindible Morir a Tiempo para Despertar en la Tierra.

“La vida, de pronto, no era más que ese milagro que siempre habías estado esperando”, reconoce mi personaje (o yo), ante lo evidente.

 

9º ¿Estamos en un tiempo  y en una sociedad que la mayoría no sabemos quiénes somos?

Estamos despertando. Estamos reconectando con la intuición que significa “saber no reconocido”.  Ya no es la razón quien ofrece respuestas a este hecho tan increíble y mágico de estar vivos, sino la intuición: esa que recuerda lo que hemos decidido olvidar. Y digo “decidido” porque la ignorancia es quien nos permite jugar el juego: “Bendita ignorancia que nos permite experimentar las distintas emociones”, dice en Morir a Tiempo. Podemos experimentar intensamente cada sentimiento gracias al olvido de quienes somos. “como un juego que se hastía de saberse el resultado, y olvida lo ya sabido para volverse a jugar, por el goce que produce recuperar lo perdido”, sintetiza en Despertar…

La vida es un hecho mucho más extraordinario de lo que alguna vez imaginamos, y estamos empezando a recordarlo. Y el miedo, expresado en la violencia que hoy observamos, es la encargada de urgirnos a este despertar.

10º ¿Qué sientes cuando tanta gente que ha leído tus libros te da las gracias por descubrir lo que han leído en ellos?

 Alegría por ese que ha abierto los ojos. Una profunda alegría porque sé lo que le espera. No necesariamente una vida fácil, sino apasionante, despierta. Con sentido.

11º ¿Crees que es una época de renovación de valores y de sentido de la vida  en la humanidad?

Lo es. No solo porque se nos antoje en este plano, sino porque en otros planos el movimiento solar y planetario está irradiando nuevas energía que nos conecta con otras vibraciones, que nos permite percibir aquello que antes no podíamos. Se llama luz, y todos sabemos lo que sucede cuando se enciende la luz. Esto no significa que lo que veamos sean cosas que nos gusten. Más bien quedamos espantados ante lo que vemos… de nosotros mismos. Significa que vemos y que, por consiguiente, podemos elegir qué queremos hacer.

12º ¿La vida es más sencilla de lo que imaginamos?

Yo siento que es simple, no sencilla. Jamás podría asociar a la verdad con algo complejo o incomprensible. Para mí la verdad es simple. No sencilla; simple. Algo que siempre supimos y por eso reconocemos. En Morir a Tiempo uno de los personajes me dice cosas impactantes  y mi personaje se lo expresa de esta forma:

—“¿De dónde saca todas estas conclusiones? Son muy impactantes —reconozco.

—De su capacidad de escucharme.

—Guau, ¡qué piropo! Gracias. ¿O sea que recién se enteró?

—Sí, recién —dice ensimismado—. Recién me enteré de que siempre

lo supe”.

PD: pero como decía Mafalda: “¡qué complicado ser simple!”

 

13¿Tienes proyectos o nuevos libros en proceso?

Estoy escribiendo un tercer libro que incluye historia reales que me han sucedido, y que acuden a mí desde entonces para sintetizar o ejemplificar algún diálogo que por sutil se puede volver incomprensible. Yo soy de los ejemplos. Me encantan y me sintetizan. Y estas observaciones vestidas de ejemplos entendí que me fueron dadas también para ser transmitidas.

A esto le sumo historias de otros que son de todos, pensamientos y reflexiones.

14 Escríbenos algo improvisado que sientas en este momento o de alguno de tus escritos para toda aquella persona que lea tu entrevista conozca la luz interior de Jorge Schubert.

Me aparece algo de Morir a Tiempo:

“El norte es el amor; recuerde esto cuando se sienta perdido”

15 ¿Qué le pedirías al futuro?

Mucho presente.

 

Preguntas rápidas: 

Una ciudad? Pigué

Una sensación? Paz

Un color? Beige

Un olor? A pasto mojado

Miedo a? A mí.

Animal preferido? El caballo y mi perro.

No te gusta que? No ver

Te gusta que? Ver

Admiras a? Jesús y Ghandi.

Nunca pudiste? Pegarle una trompada a alguien.

Crees en vida extraterrestre? Claro. Todos nosotros somos extraterrestres.

Un libro? Conversaciones con Dios (Neale Donald Walsh) 

Un momento? Este.

Una comida? Bife de chorizo a punto (un corte argentino) con papas fritas

Un lugar para visitar? La conciencia.

Una película? 3)La vida es bella, Belleza Americana y La sociedad de los poetas muertos.

Un actor? Kevin Space y Ricardo Darín

Una actriz? Meryl Streep

Una canción favorita? La que refleje el momento que vivo.

 Una manía ? La puerta abierta o cerrada. Nada de a medio abrir.

Un deseo? Dejar de tenerlos. 

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